Puno. La violencia sigue aumentando en la provincia puneña de Azángaro. La Central de Operaciones Policiales de Puno informó al colaborador de El Comercio, Carlos Zanabria, que manifestantes incendiaron la comisaría de Azángaro, en la que se encontraban solo 12 efectivos.
En la violenta medida hay cuatro policías desaparecidos y las autoridades creen que estos han sido tomados en calidad de rehenes por los revoltosos.
El coronel Herbert Rosas, jefe de la XII Dirterpol Puno, declaró a “Canal N” que la turba de manifestantes estaba compuesta por alrededor de 200 personas.
RPP informó que los revoltosos llegaron hasta el Banco de la Nación de Azángaro y lanzaron piedras y prendieron fuego a la entidad financiera.
Cabe indicar que los manifestantes impidieron violentamente al corresponsal de RPP, Moisés Rodríguez, continuar con su reporte.
El alcalde de Azángaro, Efraín Murillo Quispe, llamó a los pobladores de la provincia aguardar las soluciones y mantener la calma.
“Entiendo que ellos están muy molestos porque la policía ha matado a nuestra gente. La solución está al 90%, faltaría la firma de los ministros para que ya se publique y entre en vigencia el decreto. Pedimos la calma, guarden la cordura”, dijo Murrillo Quispe en diálogo con Radio Programas del Perú.
En tanto, los desmanes continúan en Juliaca, donde la División Nacional de Operaciones Especiales (Dinoes) se ha desplegado por las calles y ha lanzado gases lacrimógenos debido a que los manifestantes intentaron entrar y saquear la tienda de Plaza Vea.
Fuente: Elcomercio.pe
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