La Fundación Bustamante es arequipeña y centra sus intereses en los estudios socioeconómicos, jurídicos e históricos. Tiene 52 años, un fondo editorial y más de 60 títulos publicados, la mayoría escritos por notables. Conversamos con el abogado Manuel Bustamante, su presidente.
“El ejercicio dedicado y disciplinado de mi profesión me ha llevado a mantenerme siempre vigente”, nos dice el abogado Manuel Bustamante, socio del estudio Llona & Bustamante y presidente de la Fundación Bustamante.
Dicen que el Perú está mal construido porque lo hicieron abogados, ¿qué opina?
(Ríe). Hay todo tipo de abogados. Un abogado no es siempre un buen administrador. Antes, su preparación era completa y cubría muchos ámbitos y llegaban fácil a la política. Eso se perdió. Pero ahora la juventud está retomando el interés en la política y eso es bueno, porque un país sin políticos preparados no puede avanzar, llegar al primer mundo.
Con los vaivenes que hemos vivido, ¿era un buen negocio ser especialista en derecho societario?
Tuvo sus altas y bajas. En el velasquismo y el primer gobierno de García, las empresas se defendían y no construían: no era una actividad positiva sino defensiva. Los tiempos cambiaron, el derecho se hizo complejo, los esquemas de negocios son otros y la especialización es inevitable. Hoy los negocios son multinacionales y debemos saber las reglas de juego de todos los países, pues las normas de otros lugares y las nuestras deben compaginarse.
¿Cómo ven al país los inversionistas foráneos?
A veces se asustan, sobre todo por el Poder Judicial, porque buscan uno que sea solvente y allí, lamentablemente, se ven situaciones anómalas todos los días. Nuestro sistema judicial se ha convertido en un factor de riesgo. Pero debemos mejorar y convocar a profesionales bien preparados y con buenos sueldos.
La Fundación Bustamante tiene más de 50 años...
Así es. La fundó mi padre, Manuel J. Bustamante, quien destinó una parte de su patrimonio para la fundación, que circunscribe sus actividades a tres terrenos: el socioeconómico, el jurídico y el histórico. En 1985 fundamos un fondo editorial que ha publicado más de 60 títulos. Nosotros financiamos las investigaciones de los autores para que puedan dedicarse a plenitud. Acabamos de presentar tres estudios sobre las consecuencias del cambio climático realizados con la Universidad de Piura (Piura), la Asociación Civil Labor (Arequipa) y el Centro de Estudios Teológicos de la Amazonía (Iquitos).
¿Por qué están preocupados en este tema?
Porque si no tomamos medidas, lo lamentaremos en el futuro, y todos queremos un mundo mejor para nuestros hijos y nietos. Queremos crear una corriente de opinión que se preocupe.
Con ustedes han publicado personalidades notables...
Claro, allí tenemos a Edgardo Rivera Martínez, Marcial Rubio, Javier de Belaúnde; tenemos estudios de Raúl Porras y Jorge Basadre; antologías, etcétera. Nos interesan los temas de actualidad y buscamos a los profesionales más destacados para que los desarrollen.
Y, en 2008, por los 50 años de la fundación, crearon el premio Manuel J. Bustamante de la Fuente...
Así es. En 2008, en el área socioeconómica, el premio fue entregado a Felipe Ortiz de Zevallos. En 2009, en el área jurídica, recayó en Alfredo Bullard. Y este año premiaremos a alguien que haya publicado algo en los últimos tres años, dedicado a la historia. El jurado está integrado por representantes de la Católica, la UPC, la del Pacífico y, por la fundación, Fernando de Trazegnies.
¿Qué aprendió de su padre?
Su capacidad de trabajo, su honorabilidad, sus principios. Nunca transó y, por eso, vivió muchos años deportado. Estuvo muy metido en política –fue asesor de José Luis Bustamante, con quien se peleó por la alianza de mi tío José Luis con el Apra– y muy radical. Por eso le decían Manuel 'J’, y mejor no le digo por qué (risas).
¿Qué les dejará a sus hijos y nietos además de fortuna?
(Ríe). Honorabilidad, un nombre y educación. No les daré pescado sino una caña de pescar. Cada uno debe buscar su propio camino y perspectivas. Felizmente, este es el mejor Perú que he vivido.
Fuente: Peru21
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